Como viene siendo habitual en los últimos años, la compra online sigue escalando posiciones en la preferencia entre los consumidores. Un 74% de los internautas de entre 16 y 60 años – Según el último estudio anual de Ecommerce de IAB – compra online habitualmente, por lo que debemos aumentar nuestros esfuerzos para que se sientan a gusto en nuestra web y repitan.

Fidelizar compradores debe ser uno de los grandes objetivos de las empresas, y para eso es imprescindible rodear a nuestro producto de un contexto amigable y apetecible. Estamos ante un público que cada vez conoce mejor la compra online y, por lo tanto, no sirve de nada ofrecer precios muy competitivos si descuidamos la información, la usabilidad de nuestra tienda online y el aspecto general.

Hacer esto supondría perder la confianza de nuestros compradores, que basan su fidelización en este factor. Por lo tanto, si queremos hacernos con una clientela fija, deberemos tener en cuenta los siguientes aspectos:

Facilidad y ahorro de tiempo

Si no damos facilidades a los usuarios para realizar sus compras, se perderán por el camino y estarán a un click de abandonar la compra. Ten en cuenta que, al contrario que en el mundo físico, en Internet tienes la competencia demasiado cerca y accesible como para arriesgarte a no dejar del todo conformes a tus clientes.

Información, información y más información

Cualquier duda sobre lo que compran se convierte en un riesgo. Ten en cuenta el medio en el que están comprando y que perfectamente pueden tener el mismo producto  en la pestaña de la derecha y las experiencias de otros usuarios en la de la izquierda. Por lo tanto, no escatimes en información ni en comodidades. Y, si utilizas redes sociales o cualquier otro método para comunicarte con tus clientes, no los abandones. No hay peor sensación para un cliente que sentirse ignorado.

Accesibilidad

Aunque está estrechamente relacionado con la facilidad de uso, conviene destacar la accesibilidad de tu web, puesto que no sabes quién va a acceder a ella. Esta accesibilidad se debe tratar desde dos perspectivas principales: El usuario de la web y el dispositivo desde el que se accede. Etiquetas alt, una estructura coherente y mensajes claros para que los usuarios sepan siempre donde están y qué tienen en frente, sea cual sea su condición. Por otra parte, aunque la mayoría de las compras se siguen haciendo desde ordenadores de sobremesa y portátil,  la compra a través de dispositivos móviles aumenta su protagonismo. Por ello, debes cuidar el proceso de compra en todos los formatos que permite tu web.

Facilitar la compra con Aplicaciones Móviles

Si bien los smartphones no son los dispositivos preferentes para adquirir productos y servicios online, la compra a través de Aplicaciones supone un gran estímulo para facilitar la compra. Un 60% de los usuarios de móviles prefieren comprar desde aplicaciones por comodidad.

En la próxima entrada seguiremos analizando las preferencias de los compradores online y nos centraremos en el proceso de compra.